Mermeladas
La mermelada es uno de los métodos más simples de conserva; se puede usar casi cualquier fruta e incluso, verduras. El azúcar reacciona con las pectinas y el ácido de las frutas para hacer una gelatina y actúa como conservante natural, ya que evita el desarrollo de mohos, al estar en alto contenido. El factor más importante es lograr un equilibrio de acidez y pectinas, que dé como resultado una buena consistencia.
Muchas frutas poseen el equilibrio en forma natural, pero otras necesitan algo de ayuda. Se logra esto agregando jugo de limón y frutas ricas en pectinas, tales como manzanas o caldo de pectinas casero.
Tener en cuenta que siempre debe mantenerse la relación entre pectinas y azúcar: si el agregado de caldo de pectinas aumenta el volumen de pulpa de fruta en una tercera parte, entonces debe añadirse una tercera parte más de azúcar.
Si se desea una mermelada de sabor más fresco, se puede reducir la cantidad de azúcar pero será más blanda y su duración menor, y deberá mantenerse en heladera, ya que la proporción de azúcar no será lo suficientemente alta como para evitar el desarrollo de moho.