El cochayuyo (Durvillaea antarctica) es un alimento muy saludable, por su elevado aporte de fibra, minerales –en especial yodo, calcio, hierro y magnesio- y proteínas ricas en aminoácidos esenciales.
Su consumo en Chile es de larga data, los pueblos indígenas precolombinos lo preparaban asándolo a las brasas y luego cociéndolo por largas horas y, en la época colonial, fue un ingrediente principal de los tradicionales “guisos de viernes”, día en que los fieles debían abstenerse de comer carne.
Ingredientes
200 gramos cochayuyo ( alga parda comestible rica en yodo)
aceite
1 cebolla, picada en cuadritos finos
1 ajo
1/2 pimentón verde y/o rojo, picado en cuadritos
1 zanahoria grande, rallada
1 cdta. sal
pimienta
orégano
4 papas, en mitades
zapallo, en trozos (igual volumen que el de las papas)
1/2 litro caldo de verduras o agua
1 taza arvejas
1 taza choclo, en granos
1 cdta. ají de color
ají merquén o en pasta a gusto
cilantro fresco, picado fino
un poco de leche
Para acompañar
huevos fritos
ensalada de hojas verdes
Preparación
Limpiar el cochayuyo con un paño seco, sin mojarlo.
Disponerlo en la lata del horno y ubicarla en la parte baja de este. Tostar el cochayuyo por
unos minutos en el horno a 180°C, hasta que explote, pero sin que se queme.
Una vez tostado, dejarlo enfriar y ponerlo dentro de una bolsa plástica.
Cerrarla bien y moler el cochayuyo haciendo rodar un uslero por sobre la bolsa. Se obtiene una taza de polvo de cochayuyo, aproximadamente. Reservar.
Para preparar el guiso, comenzar calentando el aceite en una olla.
Saltear allí el ajo y la cebolla, el pimentón y la zanahoria. Remover, sazonar y agregar las papas y el zapallo. Continuar salteando por unos 3 minutos, revolviendo ocasionalmente. Añadir el caldo, las arvejas y el choclo y dejar cocinar a fuego suave. Una vez que las papas estén blandas (alrededor de 12 minutos), retirar estas junto con el zapallo y, en una fuente, molerlos con un mazo. Devolverlos a la olla y agregar el cochayuyo reservado.
Revolver bien todo y añadir un poco de leche. Mezclar suavemente y apagar el fuego. Rociar con un chorrito de aceite, ají de color y cilantro fresco.
Servir bien caliente, acompañado de un huevo frito y ensalada de hojas verdes.