1 masa de tarta dulce, algo profunda (ver receta)

Relleno

4 yemas
5 cucharadas de jugo de limón
3/4 de taza de azúcar
ralladura de 1 limón
1/2 cucharada de gelatina, en polvo, sin sabor
1/3 de taza de agua fría
4 claras

Cubierta

1 taza de crema de leche
1/4 de taza de azúcar
1/2 cucharadita de ralladura de limón
1/2 cucharadita de ralladura de naranja
50 gramos de almendras peladas (sin la piel marrón) tostadas y fileteadas

Preparación

Ponga las yemas en una cacerolita y bátalas con la 1/2 taza de azúcar y la ralladura y el jugo de limón.
Revuelva continuamente sobre el fuego, hasta que espese sin que llegue a hervir. Retire y vuelque en un bol para que enfríe.

Remoje la gelatina en el agua fría agréguesela a la crema anterior. Revuelva hasta que se disuelva. Enfríe.

Bata las claras a nieve, agréguele de a poco el cuarto de taza de azúcar restante. Siga batiendo hasta que el merengue haga picos bien firmes.

Una este merengue a la crema de limón hecha anteriormente.  Mezcle bien. Rellene con esta mezcla la tarta que ya tendrá cocida con anterioridad y lleve a la heladeras hasta que el relleno esté firme.

Bata la crema de leche con el 1/4 de tasa de azúcar y la ralladuras de limón y naranja, hasta que alcance el punto chantilly.

Ponga en manga de boquilla ancha (para que las ralladuras no obstruyan la aberturas y decore la tarta con copos.

Salpique el merengue con las almendras y mantenga el pastel en la heladera hasta el momento de servir.