Algunos consejos
Cuando preparamos un almíbar, siempre que la receta no indique otra cosa, debemos de calcular una parte de agua y dos de azúcar. Una vez puesto sobre el fuego no debemos revolverlo.
Si comprobamos, que se nos ha pasado de un punto determinado podemos en ese caso agregarle agua y continuar la cocción hasta lograr el punto deseado nuevamente.
Los distintos puntos del almíbar son:
Primer punto: ALMÍBAR LIVIANO
Es cuando dejamos hervir el agua con el azúcar hasta que ésta se disuelva completamente, alrededor de 5′ aproximadamente.
Segundo punto: HILO FLOJO
Se conoce este punto cuando al tomar entre los dedos un poco del almíbar que estamos cocinando y al separarlo se forma un hilo fino y quebradizo.
Tercer punto: HILO FUERTE
Este punto se conoce porque al hacer la misma operación anterior se forma un hilo que no se corta.
Cuarto punto: BOLITA BLANDA
Cuando tomando un poco del almíbar de la cocción, en una cucharita y dejándolo caer en una taza con abundante agua fría, se forma enseguida una bolita blanda, a la que se le puede dar la forma que se desee con la yema de los dedos.
Quinto punto: BOLITA DURA
Cuando repitiendo todo lo anterior se puede formar una bolita dura, que no se deforma.
Sexto punto: PUNTO CARAMELO
Cuando al dejar el almíbar sobre el fuego, los bordes comienzan a tomar un tono más oscuro, que se extiende rápidamente por toda ¡a superficie. Se debe retirar enseguida que tome el tono deseado y usarlo inmediatamente.