Ingredientes
Para los ñoquis
1 litro leche
1 taza sémola de trigo
1 pizca de sal
Para la salsa
aceite
1 cebolla, en cuadritos
ají de color o condimentos a gusto
salsa de tomates
1 puñado grande de callampas secas (hongos comestibles), remojadas en agua tibia por 1/2 hora y picadas finas
Preparación
Limpiar bien la mesada de la cocina, pues se va a utilizar en la preparación.
Precalentar el horno a temperatura media-baja.
Poner a hervir la leche en una olla, mejor si es de aluminio, así se pega menos. (Para que la leche no se pegue a la olla, mojar el interior de esta con agua fría antes de echar la leche.)
Cuando hierva, agregar la sal, retirar del fuego y añadir la taza de sémola en forma de lluvia, revolviéndola constantemente con cuchara de palo, para que no se formen grumos.
Volver a poner al fuego, durante unos 5 a 7 minutos aproximadamente, sin dejar de revolver.
Cuando la sémola esté cocida y espesa, se vuelca sobre el mesón de la cocina y ahí se deja enfriar.
Mientras, preparar la salsa. En una sartén, freír la cebolla, condimentar a gusto y, cuando esté transparente, añadir la salsa de tomates, las callampas y la hoja de laurel. Cocinar unos minutos a fuego suave para incorporar los sabores y reservar.
Una vez que la sémola se haya enfriado, cortar en cuadraditos con un cuchillo romo. Usando una espátula, despegarlos del mesón y disponerlos por capas dentro de una budinera enmantecada, alternando con la salsa.
Terminar con una capa de salsa y espolvorear encima el queso rallado.
Llevar la fuente al horno por 10 a 15 minutos o hasta que la salsa esté burbujeante y el queso derretido.
Servir caliente, con albahaca picada.